sábado, 29 de junio de 2013

RENUNCIA



Renunciar no es exactamente a lo que me refiero con el título de este artículo, pues lo que trato de decír es, que hay que disfrutar de la vida, divertirse, vivir el amor, de la meditación, de las bellezas del mundo, del éx­tasis que estamos vivos... ¡goza de todo! Transforma lo mundano en sa­grado. Transforma una cinta con otra y forma un lazo, transforma el mundo que vivimos en la tierra prometida. y por medio de una magia, comienza a producirse indirectamente una cierta renuncia. Pero es una cosa que ocurre, no la haces tú.

No es algo que haces intencional, es algo que ocurre, así de simple. Empiezas a renunciar a tus tonterías, empiezas a renunciar a lo superficial, a lo que no te da feeling, a trabajos que no satisfacen tu ser, a lugares en lo que no era posible tu crecimiento, a lo burdo, a toda la basura que te rodea. eso lo llamo felicidad o simplemente entendimiento del ser.


Si llevas piedra en la mano creyendo que son diamantes, y no piensas dejarlas por la concepción que tienes. La gente te la puede respetar, ¿qué necesidad hay de renunciar a ellas?, pero si tu ser se da cuenta que no son verdaderamente diamantes, tu misma conciencia hará que se salgan solas de tus manos. De hecho, si quieres seguir llevándolas tendrás que hacer un gran esfuerzo, tendrás que aplicar mucha voluntad para seguir llevándolas. Pero no podrás llevarlas mucho tiempo; en cuanto hayas visto que son inútiles, que no valen nada, tendrás ga­nas de tirarlas.


Y cuando tus manos queden vacías, podrás buscar auténticos tesoros. Y los tesoros auténticos no están en el futuro. Los auténticos tesoros están aquí mismo, ahora.


Vivimos sin prestar ninguna atención a lo que ocurre a nuestro alrededor. Sí, hemos llegado a ser muy eficientes en lo referente a hacer cosas. Lo que hacemos, lo hacemos ya tan eficientemente que no necesitamos ninguna conciencia para hacerlo. Se ha convertido en algo mecánico, automático. Funcionamos como robots.


Todavía no somos hombres, somos máquinas y cada vez más. Eso era lo que el Maestro y filósofo George Gurdjieff decía una y otra vez, que el hombre, tal como existe, es una máquina. Ofendió a mucha gente, porque a nadie le gusta que le llamen máquina. A las máquinas les gusta que las llamen dioses; entonces se sienten muy felices, se inflan su ego de satisfacción. Gurdjieff decía que las personas eran máqui­nas y tenía razón. Si te contemplas a ti mismo" verás lo mecánico que es tu comportamiento.


<Si miramos a nuestro alrededor, nos podemos sorprender, por el hombre, porque parece el hombre más dormido de la tierra>.


Estamos vivos solo en la medida en que estamos despiertos. La conciencia es la diferencia entre la vida y la muerte. No estamos vivos solo por estar respirando o solo porque nuestro corazón late. Fisiológicamente se puede mantener vivo en un hospital sin ninguna conciencia. Tu corazón seguirá latiendo y serás capaz de respirar. Así te puedes mantener vivo en un estado mecánico durante muchos años... mientras la tecnología avanza, hace posible que tu muerte se posponga indefinidamente, muchos dicen que eso es vida.


Hice esta analogía del hospital porque hay muchas personas dormidas o muertas. Cuanta gente no está muerta en su cama con su pareja, en su trabajo, en su grupo social, con su familia, y dicen que están viviendo la vida nada mas porque su corazón late o su respiración fluye. Son unos cadáveres andantes y hablan y hacen cosas automáticamente, no son más que unos robots.


En resumen, el tonto duerme... y todo el que esté dormido, no es más que otro tonto. -espero que no se ofendan- y éstos dormidos son lo que viven en sueno, siguen haciendo cosas de las que no quieren hacer o que realmente saben que no les agrega valor en su vida. por eso digo, tu propia conciencia y acciones harán que RENUNCIES.


Hasta el próximo escrito,


Se les quiere,
Miguelangel.

domingo, 2 de junio de 2013

FOCO




"La clave para el éxito consiste en enfocarse conscientemente en las cosas que se desean en lugar de enfocarse en las cosas que no se desean" Brian Tracy

¿Alguna vez te has preguntado cuánta energía gastas en pensar en todo aquello que aún no sucede y te asusta que suceda? ¿cuántos minutos y horas utilizas para pensar en todo lo que no quieres que te pase?…

El miedo a todas esas declinaciones como: el fracaso, una enfermedad y hasta la misma pobreza... no son más que fantasmas que invaden el pensamiento del ser humano cuando no ejercitan el “músculo” llamado: Voluntad.

Todos los seres humanos nacemos con este don (voluntad) y éste es el que nos da el poder de elegir y de conducir nuestra mente a cada momento de nuestra vida por dónde queremos que vaya.

Si todos los días desde que abres los ojos decides poner tu atención en todo lo que para ti tiene valor: tu salud, el bienestar, tu familia, tus amigos, un amor, los planes a corto, mediano y largo plazo, tu capacidad para realizar tantas cosas durante un día, empezaría a experimentar la vida desde otra perspectiva, desde tu poder creativo, tu origen divino, desde esa fuerza interna que te conecta con tu verdadera esencia.

Muchas personas no logran su objetivo es precisamente por falta de foco, una simple palabra de cuatro letras que se convierte en una realidad y un lineamiento de logros de objetivos.

A veces, cuando perdemos el foco nos preocupamos, nos desesperamos y hasta hemos tomado decisiones inapropiadas que nos han llevado directamente al fracaso o a esa falta de motivación por las cosas. Ésto no es nada mas que esa etiqueta que muchos le ponen como "la mala suerte" o "no consigo lo que quiero"...

Bueno, cuando te suceda esa experiencia ya sabes que tienes ese poder y es únicamente tu decisión permitir que tu voluntad elija en qué enfocas tu atención y tus pensamientos.

Aquí te dejo una manera de ganar enfoque a buenos resultados y no es nada más que haciendo el método de  “preguntas-resultado”…

Si te preguntas a ti mismo, algo de lo que te preocupa o te salió mal, escucharás internamente muchas explicaciones orientadas a lo malo de la situación, a los "porqués", con lo cuál estarás lejos de enfocarse en alguna solución para ello.

Pero si te preguntas: ¿Qué deseo en realidad?, ¿Cómo estoy actuando frente a la cotidianidad?, ¿En qué sentido me gustaría cambiar las cosas?, estoy seguro que tus pensamientos se reorientan a tratar acerca de la posible solución…Se trata entonces de formular esas “preguntas-resultados”, al tener en claro como objetivo básico, alejarnos del problema y enfocarnos hacia la solución.

Otro enfoque importante es dar preferencia al "Cómo" en lugar de preguntarse "Por qué". Las preguntas de este último tipo suscitan razones y explicaciones, y justificaciones y excusas, pero como decía, no se saca de ellas, por lo general, ninguna información útil.

Estas preguntas oportunas te orientarán y te darán enfoque para lograr esas cosas que tanto deseas y estar bien contigo mismo y con los demás.

Esto es todo por hoy.
Hasta entonces...

Se les quiere,
Miguelangel.